Este es el gran interrogante. De la realidad se desprende que el parate económico nos lleva al abismo de la pobreza. La destrucción del tejido económico productivo es inevitable si no hay ideas y consenso para preservarlo. Nadie sabe con certeza cuánto será el daño, pero sí se sabe que será cruel.No existe mayoritariamente la idea que es la cuarentena la culpable. Nadie quiere enfermos y mucho menos muertes. Es la falta de ideas y ejecutividad para presevar ese tejido productivo lo que empuja a deslegitimar la cuarentena.El gobierno debe actuar, y rápido, para preservar lo que hoy intenta preservar a medias. Faltan ideas creativas y fundamentalmente consenso. Esto sera la diferencia entre salir de la crisis con grandes costos sociales o con las empresas debilitadas pero recuperables.
Audio en Radio Consumer Periodismo-Ir a Reproductor.-
